Wenceslao Marcial Guillén, Wen

Wenceslao Marcial Guillén, Wen
Fundador de Los Panfleteros de Santiago

jueves, 8 de marzo de 2012

Día Internacional de la Mujer

Día Internacional de la Mujer
Giannella Perdomo Pérez

Durante el proceso evolutivo de la humanidad, la mujer ha desempeñado roles de significativa importancia. La página oficial del Día Internacional de la Mujer, nos permite leer, entre otros datos: ¨ En el año 1917, y como reacción ante los 2 millones de soldados rusos muertos en la guerra, las mujeres rusas escogieron de nuevo el último domingo de febrero para declararse en huelga en demanda de "pan y paz". Los dirigentes políticos criticaron la oportunidad de la huelga, pero las mujeres la hicieron de todos modos; cuatro días después el Zar se vio obligado a abdicar y el gobierno provisional concedió a las mujeres el derecho de voto. Ese histórico domingo fue el 23 de febrero, según el calendario juliano utilizado entonces en Rusia, o el 8 de marzo, según el calendario gregoriano utilizado en otros países¨.

El Secretario General de Naciones Unidas, Kofi Annan, (período 1997-2006), galardonado con el Premio Nóbel de la Paz, el 10 de diciembre del 2001, en su mensaje con motivo del Día Internacional de la Mujer, el 8 de marzo del 2005, - conforme a la fuente de datos de las Naciones Unidas-, declaraba: ¨… En 1995 las mujeres se reunieron en Beijing y dieron un enorme paso hacia delante en nombre de la humanidad¨.

El Sr. Annan, también comenta: ¨ Desde entonces todos los estudios realizados nos han enseñado que no existe un instrumento de desarrollo más eficaz que la potenciación de la mujer¨.

En igual contexto, la Organización de las Naciones Unidas, reconociendo el valor de la mujer, expone: ¨Actualmente, uno de los principios rectores esenciales de la labor de las Naciones Unidas es que no puede hallarse una solución duradera a los problemas sociales, económicos y políticos más acuciantes de la sociedad sin la cabal participación y plena habilitación de las mujeres del mundo¨.
Sobre estos legajos, respecto a las recientes luchas de la mujer dominicana, por conquistar las libertades y sembrar el alba de nuestra democracia, podría enumerar un sinnúmero de las que bajo diferentes modalidades, lucharon unas, entregaron sus vidas las otras; las que permanecen casi anónimas, sin olvidar el papel de aquellas encerradas en las cruentas mazmorras de la cárcel o las que tomaron acciones de guerra en las trincheras de honor de Abril del 1965.
También existen otras mujeres, que desde el tranquilo ambiente de sus hogares, se convierten en grandes defensoras de las causas incorrectas; solidarias, compañeras! A ellas quiero saludar, de manera especial, en conmemoración del Día Internacional de la Mujer! A Doña Colombia y a Doña Diana, vecinas de Santiago, que por su arrojo y valentía, burlaron la vigilancia continua de nuestro hogar y nos hicieron partícipes de sus ricas viandas y apetitosos manjares. Jamás olvidaré, aquella noche fría, el suculento platón que Doña Diana nos pasara por encima de la pared colindante entre ambas viviendas. Recuerdo de manera ¨espectacular¨ la yuca, blanca, hervida, con rueditas transparentes de cebolla, colocadas con esmero por encima de tantos huevos como éramos en casa; el vaho de los alimentos despedía aromas de mucho amor. Esa noche, además de la congoja y vergüenza vividas ante ese regalo –nadie jamás nos envió comidas-, atragantados, sin hacer comentarios, tuvimos una agradable cena.
Con Doña Colombia la vivencia se torna diferente. Conversando con mi madre, en los alrededores del vecindario, se enteró que mi hermana pequeña, Elia Celeste, -aduciendo lo que ella creía por la falta de su padre-, estaba desganada, con muy poco apetito, situación que a ella le preocupaba. Este maternal comentario bastó para que Doña Colombia, cada día, sin que pueda precisar el tiempo, - de igual modo a como lo hacía Doña Diana-, sobre el borde superior limítrofe que separaba nuestras casas, en bandejas finamente vestidas, recibíamos su exquisita y suculenta comida, en considerables cantidades servidas, que a tales efectos, mi hermano y yo disfrutábamos de las mismas.
Para concluir estas observaciones, es preciso citar: ¨ El Día Internacional de la Mujer es cada vez más una ocasión para reflexionar sobre los avances conseguidos, exigir cambios y celebrar los actos de valor y decisión de mujeres comunes que han desempeñado una función extraordinaria en la historia de los derechos de la mujer.
Para aquellas mujeres de Santiago que nos brindaron apoyo, extendieron sus manos en gestos solidarios, mi galardón de gratitud! Gracias a tantas como ellas, una vez más podemos conmemorar, cada 8 de Marzo, esta festividad universal.

giannellaperdomo@hotmail.com